El australiano Daniel Ricciardo (Red Bull) ganó en Malasia, en lo que fue su cuarto triunfo en la Fórmula 1, y repitió el festejo que ya es una marca registrada. En el podio, bebió champagne de su calzado, a pedido del público. Lo curioso, esta vez, fue que compartió el trago con el holandés Max Verstappen y el alemán Nico Rosberg.