La Fórmula 1 no descansa y los equipos y pilotos están ya en el Circuito de Shakir, donde tendrá lugar el Gran Premio de Bahréin. Carlos Sainz, piloto de Toro Rosso, llega a la carrera del desierto tras hacer una de sus mejores actuaciones en China, donde arriesgó con su estrategia al inicio del Gran Premio y acabó llevándose su premio.

Sainz espera ahora mejorar su rendimiento en este circuito, donde no ha logrado terminar desde que debutó en la Fórmula 1. El madrileño ha logrado cuajar buenas actuaciones los sábados, pero nunca ha conseguido transformarlas de cara al domingo, donde diferentes problemas le han hecho saldar con abandono sus dos participaciones.

“Es frustrante no haber terminado ni una carrera en Bahréin. En ambos casos recuerdo haber clasificado bien y salir mejor, pero en 2015 tuve un problema con la unidad de potencia y en 2016 me toqué con Pérez en la primera vuelta. Espero que este año podamos cambiar las cosas y sumar buenos puntos. ¡A la tercera va la vencida!”, comenta Sainz.

Por otra parte, el piloto de Toro Rosso habla sobre las condiciones que se encontrarán en Bahréin, donde el horario influirá bastante. La primera jornada del Gran Premio tendrá una sesión por la mañana y otra por la tarde, lo que complicará la recogida de datos y la configuración del monoplaza de cara al sábado.

“Diría que prefiero siempre competir con calor, excepto en Singapur, allí hay demasiada humedad y el calor es horrible. Una de las cosas que hace este Gran Premio complicado es que el viernes tenemos una sesión libre durante el día, con calor y viento y otra por la noche, cuando hace más fresco. Esto hace que sea difícil encarar bien el fin de semana”, finaliza el madrileño.